El doctor Gontrand López Nava, especialista en Aparato Digestivo y Endoscopias y jefe de este Servicio del Universitario de Madrid Sanchinarro, realiza esta intervención en Valladolid en el Hospital Campo Grande, único centro de referencia en la provincia para esta técnica que ni cubre la sanidad pública ni los seguros privados y es de los pocos que lo practican en Castilla y León.

Ayer, este especialista abrió las puertas de su quirófano para mostrar la intervención realizada a Juan, que duró apenas unos quince minutos, sin complicaciones y con éxito. Además del doctor López Nava, la anestesista Blanca Estremera y la auxiliar de enfermería Lucía García completaron el equipo.

Dos mil casos

Son ya en torno a cuatrocientos los vallisoletanos que han llevado o aún portan un balón en su estómago para adelgazar y dos mil los casos atendidos por este facultativo. La pérdida media de peso es de casi 24 kilos en siete meses, que es el tiempo habitual de llevar dentro este dispositivo; aunque, en caso de prescripción médica, puede volver a colocarse.

No obstante, y en ello insiste el doctor López Nava, la técnica «es muy útil, ayuda; pero requiere el apoyo de un equipo de especialistas» formado no solamente por el personal de quirófano -anestesista y personal de enfermería-, sino por un nutricionista que oriente y marque la dieta más adecuada para el paciente, corrija sus malas costumbres, inculque nuevos y saludables hábitos y de un psicólogo que intervenga en la motivación y en la modificación de conducta para que cuando se retire el balón no se recupere peso.